En el mundo de la construcción las estructuras de concreto deben ser las más resistentes de todas, pues debes estar en la capacidad de soportar su propio peso junto a otros factores, como el humano y los efectos del paso del clima

Armando Iachini, director de Construcciones Yamaro, destaca que este tipo de estructuras -y de lo que es el concreto en específico- es un material muy estable, sin ser totalmente impenetrable. De hecho, como experto, menciona que existen ciertos elementos que pueden influir en su solidez y estabilidad de forma negativa.

Los efectos climáticos afectan en la estructuras: como por ejemplo la lluvia puede hacer que el agua penetre dentro de la estructura y oxidar las vigas de acero que dan el soporte, produciendo que ésta ceda por la pérdida de firmeza. También, la oxidación es el verdadero problema que puede volverse más agresiva por el uso de químicos en las obras.

Las superficies rugosas favorece la penetración del agua: como también, los ácidos son otro problema, pues afectan no solamente al metal, sino también el concreto en sí mismo, igual que lo hace el agua de lluvia.

Probando la seguridad

Asegurar la estabilidad y la firmeza de las construcciones de concreto, los ingenieros deben hacer diferentes inspecciones detalladas desde afuera, además de hacer varias pruebas sobre la firmeza de la estructura.

La primera inspección es visual, verificando que no existan:

• Manchas de agua visible
• Estalagmitas debajo de la estructuras
• Concreto descarrilado
• Partes de refuerzo oxidado
• Superficie sin musgos

Luego los ingenieros buscan las estructuras de soporte, donde se utilizan planes de construcción antiguos y medidores magnéticos inductivos, similares a los detectores de metales que usan dispositivos de bricolaje para buscar cables y tuberías en la pared.

Los detectores de metales pueden encontrar metal hasta de 10 cm de profundidad bajo el concreto, el acero puede conseguirse a mayor profundidad. Actualmente, pueden utilizarse dispositivos de radar que pueden detectar la retención del agua.

También se sigue el procedimiento de la medición de la resistencia a la comprensión del concreto con la ayuda de un martillo de rebote el cual es impulsado por un resorte. La fuerza del rebote permite saber el impacto que el concreto absorbió, permitiendo conocer el estado de su firmeza.