Las inigualables virtudes de la Casa Erasto no han pasado desapercibidas por los entendidos, y por eso es finalista al premio Obra del años 2019, Categoría Vivienda Residencial, en México
Uno de los grandes retos de los arquitectos de hoy en día es romper el molde y realizar diseños únicos que se adapten a las condiciones más variadas. Eso, y tratar de planificar construcciones inherentemente sustentables. ¿Lo han logrado? ¡Sí! Casos hay muchos, y uno de los más recientes es el finalista al premio Obra del Año 2019, Categoría Vivienda Residencial, en México: Casa Erasto.
Casa Erasto, de acuerdo a una reciente nota publicada por el portal ObrasWebMX y recogida por Armando Iachini (Presidente de Construcciones Yamaro), es precisamente un ejemplo de lo que debería ser la arquitectura urbana del presente (y futuro): una obra que redefine el concepto de vivienda citadina y que ensalza las virtudes de los jardines en un contexto rodeado de frío, gris y concreto.
Un oasis en medio de la ciudad
La Casa Erasto se ubica en Lomas de Chapultepec, en Ciudad de México. La obra se construyó en un terreno de 470 metros cuadrados que fue remontado para dar la impresión de ser un enorme jardín enclavado en la urbe. Y es que, técnicamente hablando, lo es: su núcleo, ese que funge como espina dorsal del entramado constructivo, está rodeado de verde.
De la estructura principal, que es de concreto, vuelan losas rodeadas de cristal y vigas metálicas ahogadas en ejes principales que permiten dobles volados. O sea, todo un reto de diseño, con características aparentes que se integran a la estética y que crean la noción de que se trata de algo sencillo que, en el fondo, no lo es.
Y no lo es por todo lo antes mencionado. Por eso, y porque se trata de una construcción técnicamente compleja que se podría dividir en tres partes:
- Planta baja: El área más pública del hogar, que se conecta completamente con el exterior y genera un flujo continuo entre el jardín, la biblioteca, la sala, el comedor y la cocina.
- Primer y segundo nivel: Dos pisos de habitaciones que se asoman y flotan en las copas de los árboles.
- Azotea: Un pequeño jardín dentro del gran jardín de todo el terreno. Una especie de observatorio coronado por una sombreada pérgola de madera con extensas vistas hacia la urbe azteca.
Sustentabilidad al 100%
Casa Erasto es una vivienda que valora la autosuficiencia y, en consecuencia, está diseñada especialmente para honrar su objetivo ecológico. Lo primero que hay que destacar en este sentido es que la construcción captura y utiliza el agua pluvial. Lo segundo, que es capaz de generar su propia electricidad gracias a un conjunto de paneles solares. Lo tercero, que implementa un sistema de azotea verde que incrementa la biodiversidad y mitiga las olas de calor reflejadas a la atmósfera.