La arquitecta paraguaya Carolina Aquino es la creadora de esta innovadora idea que busca colaborar con la protección del medio ambiente y al mismo tiempo ofrecer una solución para la resolver el déficit de viviendas existente en el país suramericano.
Armando Iachini, director de Construcciones Yamaro, sostiene que reciclar plástico para la construcción de ladrillos es una alternativa tecnológica, ya que son elaborados con la combinación de cemento y plástico reciclado, destinando su uso para viviendas sociales.
Este proyecto fue presentado como tesis de grado de Aquino, en el año 2008, pero fue en 2016 cuando fue puesto en marcha como una propuesta sustentable, cuyos costos en materiales aminoran considerablemente el precio de los ladrillos.
Además, la idea principal era buscar nuevas opciones para prevenir el deterioro del medio ambiente reutilizando las grandes cantidades de residuos sólidos urbanos y los plásticos sin destino útil que puede durar hasta 500 años en degradarse.
Las pruebas arrojaron excelentes resultados, ampliando la investigación hacia otras áreas y logrando la construcción de un prototipo experimental, con la colaboración del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).
Los plásticos utilizados para el reciclado provienen de Polietileno de Baja Densidad (PEBD), Tereftalato de polietileno (PET) y Policlururo de Vinilo (PVC).
Además, su preparación es sencilla pues no necesita de grandes infraestructuras gracias a sus características técnicas, ecológicas, sociales y económicas, convirtiéndolo en un material amigable que incluye en su mezcla de 80% de plástico (reciclado), 10% de celulosa y 10% de cemento.
Se prevé que su aplicación en el campo de construcción debe ser enmarcado dentro de la sostenibilidad medioambiental y responsabilidad profesional con la naturaleza y con la sociedad.